La Ciudad de Puebla, conocida formalmente como Puebla de Zaragoza, es una de las ciudades más históricas y culturales de México. Su nombre tiene un origen que refleja tanto su fundación como su desarrollo a lo largo de los siglos.
El nombre “Puebla” proviene del término español “poblar“, que significa “establecerse” o “fundar un pueblo“. La ciudad fue oficialmente fundada el 16 de abril de 1531 por los colonizadores españoles, quienes la llamaron “Puebla de los Ángeles“. Esta denominación original se basaba en una leyenda que cuenta que el lugar para fundar la ciudad fue señalado por los ángeles, quienes también trazaron su diseño desde el cielo.
Pero Puebla y el sitio donde hoy se encuentra la capital del estado no siempre se llamó de esta manera.
El nombre original de la ciudad es el de Cuetlaxcoapan, que significa en náhuatl “Lugar donde cambian de piel las víboras” según apunta el sitio oficial de la Auditoría Superior del Estado (ASE) de Puebla.
‘Cuetlax’ se interpreta como despellejarse, cambiar de piel; ‘coa’, serpiente o multitud, diversidad cuando se junta, como elemento específico a otros vocablos que tienen funciones genéricas, mientras que ‘pan’ funciona como locativo.
El título completo de la ciudad es “Heroica Puebla de Zaragoza“, un nombre que se le otorgó en honor al general Ignacio Zaragoza, quien lideró la victoria mexicana sobre las tropas francesas en la famosa Batalla de Puebla el 5 de mayo de 1862. Este evento es un símbolo de la resistencia y valentía del pueblo mexicano y se celebra anualmente tanto en México como en Estados Unidos.
Puebla es conocida por su arquitectura colonial, sus iglesias impresionantes y su rica tradición culinaria, que incluye platos famosos como el mole poblano y los chiles en nogada. Además, la ciudad es un importante centro industrial y educativo, hogar de numerosas universidades y fábricas.
Hoy en día, Puebla sigue siendo una ciudad vibrante que combina su rico legado histórico con el dinamismo de la modernidad. Es un destino turístico destacado y un orgullo para sus habitantes, quienes continúan celebrando sus tradiciones y contribuyendo al desarrollo del país.